Es una caja pequeña, con cartitas, un puñado de marcadores rojos y 3 gaviotas de madera... inofensivo. NOOOOO! Es el arma de destrucción de amistades definitiva!
En este juego interpretaremos a uno de los supervivientes de un crucero que ha naufragado, podemos ser desde el capitán a un niño indefenso (y muy cabrón), pasando por coleccionistas de arte, mujeres fatales e incluso un médico (si juegas con la expansión); todos con dos atributos y una habilidad, lo que hace muy sencilla la dinámica de juego, con 2 categorías y 1 regla especial te desenvuelves a la perfección.
Estamos en una barcaza a la deriva, rodeados de tiburones y con provisiones escasas. Si esto fuera poco motivo para sacar nuestros instintos más bajos, las posiciones que ocupemos en el bote decidirán dos cosas fundamentales para sobrevivir, en qué orden nos llegan las provisiones y quién manejará la barca: acercándonos más o menos a la costa y haciendo que el bote vuelque hacia un lado u otro, lo que provocará la "accidental" caída al mar de un compañero.
¿No tienes suficientes razones para pelearte con tus compañeros en este juego? No te preocupes, te doy un aliciente más: en este bote están la persona que odias y la persona a la que amas. Esto se decide al azar (por cartas) para cada uno de los jugadores y es secreto; de forma que las negociaciones, favores, ataques y artimañas están garantizadas.
El juego consiste en llegar a tierra vivo y sumando el máximo de puntos. Algunos objetos entre las provisiones te darán puntos si llegas a la costa con ellos (y no te los han robado), pero te darán muchos más puntos si sobrevives junto a la persona a la que amas y en el camino tiene un fatal accidente la persona a la que odias con todas tus fuerzas.
El conflicto está garantizado, en cada turno recibiremos un objeto de las provisiones (el que está más cerca de baúl de provisiones elije primero y así sucesivamente). Las provisiones son muy variadas, el agua en forma de cantimploras es fundamental, pero también lo puede ser un cuchillo para protegernos, un botiquín, una sombrilla o unas exquisitas joyas, inútiles en alta mar pero muy valiosas si llegamos a tierra.
Después de quedarte con las migajas que otros jugadores en mejor posición no querían; podremos pedir a un jugador que nos dé un objeto, intercambiar el asiento, remar para acercarnos a la costa o simplemente no hacer nada. Siempre que alguien nos trate de pedir un objeto (robar jejeje) o intercambiar el sitio, podremos negarnos e iniciar una pelea, en la que intervendrán todos los jugadores que lo deseen. Será el momento de las alianzas y pactos, porque cada golpe que recibimos en una trifulca nos acerca a la muerte y los botiquines escasean y mucho.
Después de quedarte con las migajas que otros jugadores en mejor posición no querían; podremos pedir a un jugador que nos dé un objeto, intercambiar el asiento, remar para acercarnos a la costa o simplemente no hacer nada. Siempre que alguien nos trate de pedir un objeto (robar jejeje) o intercambiar el sitio, podremos negarnos e iniciar una pelea, en la que intervendrán todos los jugadores que lo deseen. Será el momento de las alianzas y pactos, porque cada golpe que recibimos en una trifulca nos acerca a la muerte y los botiquines escasean y mucho.
Bote Salvavidas es un juego de negociación puro y duro, muy estratégico e interpretativo, donde tendrás que apañártelas para caer bien, ser necesario en el grupo y utilizar a gente más fuerte y mejor equipada en tu beneficio propio. Todo ello procurando que al tipo al que odias no le llegue ni una gota de esa cantimplora que encontraste en las provisiones o que reciba un golpe fatal en una pelea. Aún así no bajes la guardia, sabes que en este bote alguien espera su momento para darte un empujoncito y que seas merienda de tiburones.